Los cien ojos de la cola del pavo real de Hera (2009)

 

"El panóptico de Jeremías Bentham es una obra editada a fines del siglo XVIII en la que su autor hace una descripción de la estructura arquitectónica de la prisión moderna. (...) Esa construcción arquitectónica permite que el individuo que está encerrado en la celda pueda ser observado, de manera permanente, sin que él pueda ver al vigilante. El aislamiento es total: no sólo está incapacitado para ver a quien lo vigila sino que tampoco puede ver al resto de los vigilados. La propia estructura del Panóptico impone la imposibilidad de cualquier comunicación".


Rosalía Romero, "Michel Foucault y la visión androcéntrica del Panóptico".


Indice

I-Pocas opciones.

II-Quien ¿quién?

III-Cabra de almizcle

IV-Estocolmo

V-Subordinación

VI-La danza desnuda

VII-Bufo vulgaris

VIII-Texturas

IX-Torsión

X-Panóptico

XI-Todo a la vista

XII-Los gansos de Juno

XIII-Narciso de Oriente

XIV-Sanos juicios

XV-Placeres modernos

XVI-Especies

XVII-Pleitesía

XVIII-Recursos imperiales

XIX-Teledetección

XX-Los cien ojos de la cola del pavo real de Hera



Pocas opciones


Se nace perdiz

en tierras de cetrería,

de águilas perdigueras

y así es:


La perdiz picotea la jaula.

Su carne es adorada en palacio.

¿Lo sabe ella?


/o/


La perdiz herida de muerte

aletea

justo hasta desplomarse.

--


Quien ¿quién?


Quien viste piel de oso,

colmillos en los lóbulos,

quien se pinta los labios

con tu sangre,

quien (¿quién?)

no tiene nombre

no sabe que se pinta

los labios con tu sangre,

o tal vez sí.

--


Cabra de almizcle


Esta delectable sangría en nieves.

Este juego de ser cabra de almizcle.

Todo en mí espera,

todo en mí ruega:

no me tengas piedad aunque la pida.

--


Estocolmo


Sírvase usted.

Tome lo que es suyo por derecho

de pernada, por motivo

de perfume a tabaco,

por razón de voz y eco,

por su mano en el bolsillo,

su gesto duro y perfecto,

su mala leche.

--


Subordinación


El hombre flagela al hombre

que azota al perro que acosa al gato

que devora con fruición

las alas de una polilla viva.

--


La danza desnuda


Incapaz hasta entonces

de torcer el pescuezo

de un simple pavo

("No es mi naturaleza hacer el mal"),

giraba, majestuoso

y hasta el pavo real lucía opaco

ante el oro escarlata

de sus cueros.

--


Comedia bufa


El sapo,

¿mira a Oriente a Occidente?

No se sabe,

pero que mira, mira.

--


Texturas


Seda ahogada,

ahogados gritos.

Seda verde:

la que se hila

con el gusano aún vivo

en su capullo,

muy lentamente,

a conciencia.

--


Torsión


Ella fela el real corazón

con deleite y odio

y luego desanda, virgen,

mundo abajo,

las escalas de la torre.

--


Panóptico


La ternera blanca

que dará nombre al Bósforo,

hoy bajo custodia,

atada al olivo.


El vigilante

atado también al olivo,

pero convencido de estar suelto.

--


Todo a la vista


Un mundo sin velos,

sin graciosas mentiras,

sin placeres secretos

es

un desierto sin tártaros.

--


Los gansos de Juno


A veces

unos simples graznidos

pueden salvar a una ciudad eterna.

--


Narciso de Oriente


La feria está colmada,

pero en la sala de espejos

no hay un alma,

solo la dama china,

absorta, fascinada

en la pasamanería de su sexo

frente al espejo cóncavo.

--


Sanos juicios


La niña es loca:

bordea el lago en invierno.


La niña es loca:

cruza la calle en diagonal.


La niña es loca:

le dice "Señora" a su amiga 

de siete años

quien, lúcida,

le responde con piedras.

--


Placeres modernos


Vigilancia electrónica.

Vivisección teledirigida.

Linchamiento en la empresa.

--


Especies


El humo del corazón quemado,

el vapor de la sangre,

se elevan al gran dios satelital.

--


Pleitesía


Hacednos placer,

sed tan amable.

A cambio os ofrecemos

pleitesía.


Dadnos protección

en estas tierras

y nosotros

haremos vuestro pan.

--


Recursos imperiales


Siete mil soldados

de barro cocido

para que me temas.


Siete mil alfiles

que son elefantes

y aves misteriosas

que a los elefantes llevan a su nido

sobre mi tablero

para que me temas.

--


Teledetección


Los satélites ven el fitoplancton

y la hora que es

en tu reloj.


Mejor que nos observen.

Total, yo no hago nada

y así todos estamos

más tranquilos.

¿O no?

--


Los cien ojos

Son siempre el mismo.

Los cien ojos de la cola

Son lo que son.

Los cien ojos de la cola del pavo real

Fueron de un gigante.

Los cien ojos de la cola del pavo real de Hera

Nos miran a todos.

La cola del pavo real de Hera

Es un sistema casi perfecto.

El pavo real de Hera

Es solo un pavo, pero qué majestad.

Hera

No es Io, es Juno.

Io

Ando con cien ojos.

--


Primer premio en el Concurso para Jóvenes Poetas de la Casa de los Escritores del Uruguay, edición 2009.